EL USO DEL COLOR ROJO EN DISEÑO
Por: Pepe Sanz
De todas las formas de comunicación no-verbal, el color es el método instantáneo de expresar mensajes y significados.
Además de otros usos, el color estimula y trabaja de una manera sinérgica con todos nuestros sentidos; simboliza conceptos y pensamientos abstractos, expresa fantasías, recuerda otros tiempos, lugares y produce una respuesta estética y emocional.
Muchas de las reacciones humanas hacia el color son inadvertidas y los usuarios no perciben los persuasivos efectos del color. El efecto psicológico es instantáneo mientras el color estimula los sentidos y enaltece el poder de sugestión.
En un aspecto fisiológico, el ojo humano responde a ondas energéticas. La percepción de un color está determinada por las longitudes de una onda que rebotan hacia la retina. Los componentes de la retina responden a la luz y por medio de un proceso electroquímico, envía señales al centro del cerebro para así identificarlo. En otras palabras, reaccionamos ante el color de una manera inconsciente. Todos los colores provocan reacciones psicológicas y es imposible tener el control sobre esos efectos.
Cada color posee una diferente longitud de onda la cual determina su lugar en el orden del espectro. El color que posee el arco más grande del arco iris, así como el color con mayor longitud de onda es el color rojo. Como resultado, el color rojo es indeleblemente impreso en la mente humana y los liga directamente con excitación y alta energía.
Los usuarios del color rojo lo perciben como, pasional, provocativo, excitante y dinámico. Es también visto como el más sensual de todos los colores y asimismo es igual de seductivo al utilizarlo. El rojo tiene un sinfín de simbolismos: la manzana de Adán y Eva, sangre, el chacra, raíz, fuego, amor divino, amor, audacia, valor, coraje, peligro, excitación, valentía, pasión, emoción, gloria, velocidad. Es explosivo, provocativo, dinámico, sensual, seductivo, estimulante, caliente, poderoso, feroz, prohibido, rico, elegante, refinado, maduro…’
