EL MOSAICO ROMANO MÁS GRANDE DEL MUNDO: OCULTO EN ANTAKYA, TURQUÍA
En Antakya, Turquía, conocida en la antigüedad como Antioquía, se encuentra el mosaico romano más grande jamás descubierto. Esta impresionante obra de arte, de 836 metros cuadrados, fue encontrada en 2011 durante las excavaciones para la construcción de un hotel de lujo.
Su hallazgo no solo detuvo la edificación original, sino que transformó el proyecto en un innovador Hotel-Museo, donde el mosaico y otros vestigios históricos se exhiben como parte de un Parque Arqueológico único en el mundo.
El mosaico fue desenterrado cuando los trabajadores excavaban el subsuelo para los cimientos del hotel. A medida que los arqueólogos comenzaron a explorar el sitio, quedó claro que los restos formaban parte de una estructura monumental de la época romana. Se cree que el mosaico podría ser parte del Foro de Antioquía, el centro social, comercial y político de esta ciudad histórica.
Antioquía fue una de las ciudades más importantes del Imperio Romano, famosa por su riqueza cultural y artística, lo que hace que este hallazgo sea aún más significativo.
El mosaico se distingue no solo por su tamaño, sino también por su extraordinario estado de conservación. Está compuesto por miles de pequeñas teselas que forman patrones geométricos, figuras simbólicas y escenas decorativas. Sus colores, texturas y diseño reflejan la habilidad y la sofisticación de los artesanos romanos.
En lugar de continuar con el proyecto inicial del hotel, los propietarios, en colaboración con las autoridades arqueológicas turcas, decidieron preservar el mosaico in situ y convertirlo en el eje central de un Hotel-Museo. El resultado es un alojamiento de lujo donde los huéspedes pueden disfrutar de vistas directas al mosaico desde balcones elevados o pasarelas de cristal.
El sótano del hotel alberga un auténtico Parque Arqueológico, abierto al público y gestionado por expertos en conservación. Este espacio permite que tanto huéspedes como visitantes aprecien de cerca los detalles del mosaico y otros hallazgos arqueológicos, como columnas, fragmentos de cerámica y restos arquitectónicos de la antigua Antioquía.
El mosaico puede ser visitado de forma gratuita, lo que lo convierte en una atracción accesible para turistas, estudiantes y amantes de la historia. Este enfoque fomenta la educación y el interés por el legado cultural de la región, destacando la importancia de preservar y compartir los tesoros del pasado.